Champagne Hure Freres Invitation
El origen de Champassion primero y “A la Volé” más tarde se encuentra en este productor y en esta cuvee en particular, Invitation. A finales del 2011 comenzamos a traer hasta Segovia algunas casas de este champagne de un vigneron apenas conocido en nuestro país. Tanto gustó, que en 2012 el encargo fue en tamaño palet y como curiosidad este año Francois Hure tuvo la delicadeza de etiquetar nuestra tirada como la “Cuvee C2C” (Algunos imagino conoceréis que C2C es nuestro proyecto enosolidario).
Champagne Hure Freres Invitation es el champagne de inicio de gama de Hure Freres, ese pequeño productor ubicado en el pueblo de Ludes, Montaña de Reims, calificado como premier cru. Es el champagne que constituye su mayor volumen de producción y ventas, y que como suele ocurrir en la región, el vigneron pone el mayor mimo en su elaboración ya que no lo considera su vino básico, sino el vino representa la imagen e historia de su bodega.
Compuesto del ensamblaje de las 3 principales variedades de uva en Champagne (Meunier 50 %, Pinot Noir 35 %, Chardonnay 15 %), donde destaca una Meunier muy fresca y característica del pueblo de Ludes, aunque se elabora a partir de uva de los 5 pueblos en los que la familia Hure posee viñedo (Ludes, Villedommange, Serzy, Prin y Vavray Le Grand).
Fermentación y crianza principalmente en depósitos de acero inoxidable, ensambla un porcentaje aproximado de un 30 % de vinos de otras añadas conservados por el sistema de Solera, crianza sobre sus lías en botella entre 30 y 36 meses y un dosage 8 gr.
La calidad de este productor y este viñedo no ha pasado desapercibida al Comité de Cata de la Guía Melendo 2016 (por cierto no dejéis de haceros con ella) que han valorado a la Invitation con 92 Puntos, lo que teniendo en cuenta su precio, lo convierte en uno de los mejores champagnes en relación calidad precio del mercado.
Hoy he abierto la última botella que tenía con ese degüelle de Octubre 2012, es decir con 3 años de crianza con sus lías en botella y 3 años más desde su degüelle, y he disfrutado de lo lindo, al aspecto sentimental le ha acompañado un champagne de disfrute, con esos leves síntomas evolutivos propios de una botella con años de degüelle, una nariz muy expresiva, compleja, con notas de manzana asada y frutos secos (avellana). Una boca con carácter, con una finísima burbuja ya muy integrada, elegante, con longitud y una frescura que invitaba a beber y asociarse con casi cualesquiera compañeros de viaje.