Champagne Barrat Masson es una joven bodega que inicia su andadura en el añada 2011. La pareja formada por Aurelie Masson (enóloga) y Löic Barrat (viticultor) deciden salirse de la cooperativa local donde ella trabajaba y él vendía toda su uva, para comenzar una nueva aventura y cumplir su sueño de elaborar algún día champagnes de la máxima calidad posible.
Actualmente elaboran unas 15.000 botellas y la producción máxima que se plantean realizar es de 30.000 botellas. El resto de su producción de uva lo venden a grandes maisons.
Aurelie y Löic rehabilitaron una antigua granja familiar, en Villenauxe-la-Grande, donde actualmente elaboran sus champagnes. Eligieron una prensa tradicional Coquard, elaboran cada parcela por separado y utilizan para la fermentación y crianza tanto depósitos de acero inoxidable como barricas usadas de diferentes tamaños. Sus vinos permanecen 9 meses en contacto con sus lías, antes del embotellado.
Viñedos
Su viñedo abarca un total de 7 h. ubicadas en los pueblos de Villenauxe-la-Grande y Bethon, en la frontera entre Aube y el Marne, en el límite de la región de Champagne, al sur de la Cote de Sezanne. 90 % Chardonnay y 10 % Pinot Noir.
En 2005 Löic se hace cargo de la explotación familiar y desde ese momento sus viñedos no vuelven a tratarse con herbicidas ni abonos químicos, comienza a aplicar una viticultura respetuosa con la naturaleza, que se consolida con su conversión en orgánico certificado en 2009.
Sus suelos son básicamente calcáreos (craie-tiza) y arcillosos.
Filosofía
La filosofía de elaboración de Aurelie es ser lo menos intervencionista posible, que el vino se exprese en cada momento, no provocan la fermentación maloláctica “si la hacen bien y si no también bien”. Utilizan cantidades mínimas de azufre y no clarifican ni filtran sus vinos. Como curiosidad todos sus champagnes se degüellan manualmente “a la Volee”
“Barrat Masson es un proyecto de vida en común, formado por un tándem perfecto, la sensibilidad en la elaboración de Aurelie y la pasión y dedicación que Löic profesa a su viñedo familiar. Una bodega aun en “pañales”, con mucho que demostrar, pero de esas que un día se cruzan en tu camino, te contagian la ilusión que desbordan, te muestran la formación y experiencia que hay detrás de estos dos profesionales, y sobre todo (y quizás lo más importante) en la copa su primera añada 2011 (añada complicada por cierto) evidencia detalles que solo se encuentran en los buenos champagnes”.