Descripción

¿Y un Meunier 100 % en la Cote de Bars? No conocemos ningún otro ejemplo de calidad en esta región del Aube confeccionando a partir de esta variedad de uva que tanto apasiona a los más geek del champagne. En este caso la reserva perpetua abarca las añadas 2016-2019.

Como el resto de sus champagne parcelarios, solo son elaborados a partir de los mejores y más viejos viñedos propiedad de la bodega, de una sola variedad de uva diferente, viticultura biológica, fermentación y crianza en este caso principalmente en inox. A partir de aquí cada vino pasa a incorporarse a una reserva perpetua formada por vinos surgidos de la misma parcela en añadas anteriores, y de la misma, cada año, se realiza una saca que se embotella para la segunda fermentación, realiza una crianza mínima de 36 meses con sus lías y sale al mercado sin filtrar ni clarificar y una dosis mínima de dosage si se estima necesario.

El resultado son champagnes parcelarios de una enorme complejidad, conservando la precisión, vivacidad y transmisión del terruño que caracteriza a los champagnes de Pierre Gesbais.